Nueve de los diez incendios que se propagan en el país galo anualmente son de origen humano, criminal o accidental
Gérald Darmanin, ministro del Interior francés, ha anunciado la creación de 3.000 puestos de gendarmes «verdes», gendarmes especializados en la lucha contra delitos ecológicos, segundo paso importante de una nueva policía nacional especializada en delitos medio ambientales.
El mes de junio de 2004 se creó la Office central de lutte contre les atteintes à l’environnement et à la santé publique (OCLAESP) dependiente de la Policía judicial y la Gendarmería.
64 gendarmes y policías, con un jefe, oficial, dos adjuntos, cuatro consejeros técnicos y un oficial especializado en la cooperación europea e internacional, la OCLAESP tiene por misión combatir policialmente delitos relacionados con el medio ambiente, la polución , la protección de las especies animales amenazadas, el tráfico de productos donantes y residuos tóxicos.
Ocho años después, los delitos medioambientales han crecido de manera espectacular, y el ministro del Interior anuncia oficialmente el refuerzo de la OCLAESP con la creación de 3.000 nuevos puestos, el próximo otoño/invierno.
Pasar de 64 a 3.000 números comienza por subrayar la importancia que el gobierno francés concede a la nueva policía y gendarmería ecológica nacional, tras la experiencia traumática de este verano.
Según las cifras oficiales, nueve de los diez incendios que se propagan en Francia, anualmente, son de origen humano, criminal o accidental. Entre verano se sucedieron entre 80 y 120 incendios por día. La justifica investiga una veintena de casos de pirómanos presumidos.
La creación de 3.000 nuevos puestos de gendarmes «verdes», ecológicos, irá acompañada de un incremento sustancial de los recursos administrativos, técnicos, presupuestarios, policiales y jurídicos de la OCLAESP, cuya primera misión seguirá siendo la persecución de la piromanía y los delitos ecológicos.
La Unión Europea (UE) aprobó el 2008 su Directiva relativa a la protección del medio ambiente, mediante el Derecho penal, relativamente insuficiente. La experiencia ha demostrado la necesidad urgente de revisar el Derecho penal para combatir las infracciones graves de las normas medioambientales de la UE.
Durante la presidencia francesa de la Unión, el semestre pasado, Francia intento hacer avanzar esa cuestión, con un éxito relativo. El crecimiento importante de los delitos medioambientales, la canícula y los incendios de este verano, parecen confirmar la necesidad de más cooperación y nuevos trabajos nacionales, bilaterales y multilaterales, entre países vecinos.
La nueva brigada ecológica francesa tendrá como prioridad absoluta la lucha policial contra la piromanía, pero podrá y deberá combatir las muy nuevas formas de delincuencia medio ambientales, que no siempre tienen fronteras administrativas / nacionales bien precisas.
Fuente :ABC Sociedad
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